Capsulas de Carreño

Con la piel renovada. Por Mario F. Castro Fino

Por Mario F. Castro Fino

*La colección presentada por Adidas para la Selección Colombia, es una propuesta basada en los diseños utilizados en Italia-90.
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La Copa Mundial de la FIFA representa la mayor fiesta para el deporte más popular del planeta y, como en todos los eventos de este tipo, los atuendos que vistan cada uno de los privilegiados asistentes es un tema no menor a tener en cuenta dentro de los preparativos.

A poco más de 20 días para realizarse el sorteo para la fase de grupos, y 217 días para que ruede el balón, se comienzan a develar las camisetas oficiales que vestirán las selecciones nacionales durante la competición en Rusia. Un hecho muy importante para remarcar, si se consideran todos los factores económicos, de mercadeo y de identidad cultural, que entran en juego para cada uno de los países participantes y las marcas patrocinadoras.

Este “partido” que se juegan los principales fabricantes de camisetas representa un valor cercano a los 4.000 millones de dólares, si se tienen en cuenta las cifras de facturación dadas en el pasado mundial de Brasil, un negocio de más de 10 millones de camisetas vendidas, además de la indumentaria oficial vinculada con cada uno de los equipos.

En la actualidad, Adidas es la marca líder en este campo, por encima de Nike, gracias a decisiones estratégicas tomadas en el pasado y que hoy le permiten tener la posición de privilegio. La marca alemana se vinculó como socia de los eventos organizados por FIFA desde el año 1970, una alianza que está consolidada como una de las más exitosas en el marketing deportivo actual, no solo por su relación como patrocinador y marca oficial de la indumentaria y equipamiento del rector del fútbol, sino por su misión de difundir el deporte con los programas de responsabilidad social de la entidad.

Adicionalmente, Adidas cuenta con el patrocinio de cerca del 50% de las selecciones participantes en la competición mundialista, incluyendo países como Alemania, Argentina y, para nuestro caso, Colombia, que representan los mayores volúmenes de venta de artículos licenciados. Recientemente, llevaron a cabo la renovación del contrato con el actual campeón del mundo por una cifra record de 50 millones de euros por año y una extensión hasta el mundial de Qatar en 2022.

Desde la perspectiva del aficionado, el debate se sitúa en un escenario diferente, el de lograr vincularse emocionalmente con una prenda que debe representar lo que significa su país. Una tarea muy difícil si tenemos en cuenta que los criterios son demasiado subjetivos y lograr un consenso de opiniones se hace imposible.

Sin embargo, las compañías fabricantes deben entender que son los aficionados, al final de cuentas, quienes se encargan de adoptar como un símbolo de identidad cada nueva camiseta que lanzan al mercado y quienes pagan por ella, por tal razón deben cuidar detalles que a simple vista pasan inadvertidos pero pueden tener grandes implicaciones.

La colección presentada por Adidas, donde se incluye el modelo para nuestra selección Colombia, es una propuesta basada en los diseños utilizados en la década del 90, un proyecto que busca reconectar a los aficionados a través de los aspectos emocionales del pasado. Una historia que en el caso nuestro representa las bases de un proyecto deportivo que nos dio a conocer en el fútbol mundial y hoy nos ilusiona con dar un paso más en Rusia 2018.

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