Capsulas de Carreño

Falcao, un modelo a seguir. Por Armando Villegas


Por Armando Villegas

*Los entrenadores del fútbol base deben transmitirles a los niños que no basta únicamente con el talento, que el aspecto humano es fundamental.

La mayoría de las veces no somos conscientes de nuestros propios pasos, solemos dirigirnos sin dirección alguna aunque podamos aparentar que si nos conducimos hacia algún lugar cuando realmente nos movemos mecánicamente impulsados por aquellas dificultades que determinan nuestras vidas.

Pero están quienes hacen la diferencia, los que si son conscientes de sus propios pasos y logran construirse una ruta de vida, siendo capaces de colocar su fe en Dios y aceptar sus dones para abrirse camino ante las dificultades.

Entre ellos, se encuentra Radamel Falcao, conocido en el mundo del fútbol por su gran virtud para moverse como un tigre dentro del área rival, siendo apodado de tal manera como el «Tigre Falcao». Es capaz de definir hacia el arco con una calidad única con la que enmudece por unos segundos a todo un estadio, que explota en un estallido célebre que se libera una vez que el balón va a dar en las redes, en ese grito unánime y compartido de gol.

Durante su carrera futbolística se ha situado entre los grandes delanteros del mundo, aproximándose casi a los 300 goles, con más de una docena de títulos conseguidos en su trayectoria profesional, donde ha recibido un sin fin de reconocimientos de todo tipo, posicionándose en varias ocasiones entre los primeros mejores cinco centro delanteros del mundo, siendo considerado por algunos analistas el mejor nueve que ha existido en los últimos tiempos.

Pero sobre todo, se ha convertido en un testimonio vivencial, que ha demostrado que sí es posible alcanzar un proyecto de vida de la mano de Dios, colocando en práctica principios y valores espirituales y éticos que fortalecen y embellecen al ser humano.

Ha demostrado con base en sus principios y valores, poseer una enorme fortaleza mental para sobresalir de manera airosa de las lesiones que le ha tocado vivir en su carrera, siendo la última la más grave, ya que esta lo excluyó de un mundial, pero hoy tiene la oportunidad nuevamente de ir a un mundial por primera vez, y como diría él mismo, «los tiempos de Dios son exactos», y por esas cuestiones divinas, de seguro Rusia 2018 será su mundial.

Por estas razones, no sólo por su profesión ha sido admirado por millones de personas, sino que también por la calidad de persona que es, donde su círculo cercano de amigos y familiares, de entrenadores y colegas, lo reconocen como un ejemplar amigo, esposo, padre y un excelente compañero de equipo, quienes ven en Falcao un modelo a seguir.

No me cabe duda, que Radamel Falcao para las nuevas generaciones representa un modelo a seguir, el cual desde el fútbol base debe ser puesto como un ejemplo de vida al que se debe imitar por parte de los que hoy se encuentran en su etapa formativa, porque no sólo representa al jugador sino que a su vez, a la persona que crece y potencia su talento a través de la práctica de principios y valores que lo encaminan hacia la disciplina, la responsabilidad y perseverancia, principios y valores que lo hacen ser consciente de los pasos que asume y determinan su éxito.

Hoy los entrenadores del fútbol base deben transmitirles a los niños y jóvenes jugadores que no basta únicamente con el talento, que el aspecto humano es fundamental, que se debe entrenar a su vez «el ser en valores», el cual les permita durante su formación y en el profesionalismo, vivir cada uno de sus logros con humildad y saber sobreponerse ante las dificultades de la vida.

Para ello, los niños y jóvenes futbolistas deben encontrar modelos que puedan imitar no sólo desde lo deportivo sino que también desde la calidad humana, en la búsqueda de quienes puedan ser considerados como jugadores ejemplares e íntegros por ser modelos de vida.
@dtarmando
@dtarmandovillegas

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