Capsulas de Carreño

Fiesta vestida de Verde. Por Jorge Alberto Cadavid Marín


Por Jorge Alberto Cadavid Marín

 

*Fútbol, puntos y taquilla, botín que hace olvidar la mala noche de Libertadores.
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El buen presagio se dio desde el conocimiento de la alineación: Aldo acompañando a Macnelly, Ibargüen por izquierda como queríamos, Aguilar en consonancia con Henriquez y sorpresa la presencia de Ruiz y Dayro al banco.

En cinco minutos Ruiz solucionó y dio respuesta positiva al cosquilleo de la tribuna, dos goles fueron suficientes para poner claridad al Equipo sobre el terreno de juego.

Los logros Verdes iban acompañados por la pasividad cómplice de los defensas Rojos, innegable la ventaja que da Arias cubriendo su costado, que corresponde a la derecha por donde se da la explosión verde.

Se preveía debacle, pero Medellín reaccionó  y complicó la contención local, Aldo muy bien en la creación pero deja dudas en la contención.

Quintero mostró su magia, construyendo la falta que con calidad hizo imposible la estirada de Armani, el descuento fue realidad y el cero en arco de éste finalizó.

Medellín sin Quintero fue otro, su creación se perdió, mientras la elaboración del Verde fue más vistosa, el tránsito al área contraria fue rápida y de fácil llegada, pero sin contundencia en la finalización, a Medellín le costaba ese paso al ataque, lento y predecible.

Macnelly crecía en su juego, era líder e Ibargüen con tendencia a hacer la diagonal, con su habilidad era el encargado de desequilibrar, pero perdonan y Medellín estuvo cerca de la igualdad, falló tiro penal.

Al final la fiesta fue Verde, fútbol, puntos y taquilla, cierre con Dayro de penal, botín que hace olvidar la mala noche de inicio de Libertadores y augura recuperación.

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