Capsulas de Carreño

Implosión en la estructura Verde. Por Jorge Alberto Cadavid Marín.

Por Jorge Alberto Cadavid Marín

*Ya vendrán los juicios y los descargos, el futuro debe venir con recambios y refuerzos que le den más prestancia al Equipo.

En segundos se destruyó una campaña que aunque lagunas presentó, fue de superioridad y de récord en su transcurso, después de nueve finales exitosas, en la décima cayó, 35 fechas invictas se fueron al traste en la noche menos indicada, arco invicto de local durante todo el torneo, fue vulnerada de la manera más insulsa.

En más de un partido el comentario siempre se enmarco dentro de la ineficacia en la definición, fue tema repetitivo y en los dos encuentros de la final esa palabra no fue ajena, que tal si Dayro acierta en la ida en los minutos finales a pase de Catellani y solo ante el arco elevó la pelota, que tal si Dayro en la vuelta y también para finalizar el cotejo, aprovecha el arco desguarnecido y en lugar de pasar la pelota decide patear a una portería abandonada.

La primera anotación que tomé para este comentario, fue que Nacional al inicio parecía el que tuviera que remontar y se fue encima del Tolima, tiene dos apreciaciones, definir rápido y dar tranquilidad al su ferviente público o sentirse muy superior y salia a aplastar.

Pero el zorro fue Gamero y le ganó la mano al experimentado Almirón, Tolima muy táctico y equilibrado, hace presión alta, contra ataca y crea riegos, Nacional se iba desvaneciendo y los que iniciaron con esplendor se fueron apagando, caso Vladimir.

La complementaria fue de garra del Tolima, entrega y actitud y como finalizó la inicial, Nacional se veía desconcertado, la primera anotación vino por donde más oportunidades tuvo el visitante, por derecha,confusión de zaga y portero.

Mas por amor propio que por creación, el empate llego por la vía Palacios – Vladimir, pero el ambiente no seguía siendo propicio, Tolima era mas en el campo, Nacional no atinaba, el público empujaba, pero parecía que el efecto favorecía a los Pijaos, y con pundonor y errores de los paisas se metían en el área chica a buscar la ventaja que los llevará a los tiros desde el punto penal y lo lograron en tiempo de reposición.

Este gol creció al Tolima y condenó mas al Nacional, lo que se reflejó en los cobros definitorios EFICACIA vino tinto, INEFICACIA verdolaga, algún funcionario Verde, manifestó que no vio preparar esta instancia, estarían muy convencidos.

Inesperada, desconcertante y triste, respetando la calidad inobjetable del contendor y del merecimiento de su técnico, Nacional nos cerró la puerta a una estrella que para muchos ya brillaba en el firmamento.

Dos finales a enfrentado el técnico Verde, con resultados positivo en la ida de visitante y las ha perdido en la vuelta de local, sin saber conservar la ventaja, además deja un sinsabor el no dar la cara al final de la derrota, ya vendrán los juicios y los descargos, el futuro debe venir con recambios y refuerzos que le den más prestancia al Equipo.

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