Capsulas de Carreño

Tite, líder de la “canarinha”..

SAMARA. Tite, voz de la experiencia, enderezó el camino de Brasil en 2016. Y ahora en el Mundial está  en cuartos de final y con muchas acciones de favoritismo. Foto Christian Charisius/DPA, tomada de Conmebol.com.

Por Alfredo Carreño Toro..

Adenor Leonardo Bacchi, más conocido como Tite, nació en Caxias do Sul, Brasil, el 25 de mayo de 1961. Es el entrenador de la selección brasileña, la cual ya instalada en cuartos de final, sigue ratificando su favoritismo en un mundial plagado de sorpresas.

Tite fue jugador de fútbol. Volante central inició su carrera en Caxias en 1978. Su trayectoria como futbolista fue corta, cuando a sus 28 años se vio forzado a retirarse producto de múltiples lesiones en su rodilla.

Como entrenador Tite ha conseguido importantes títulos, dentro de los que se destacan la Copa Sudamericana en 2008 con el Internacional de Porto Alegre, la Copa Libertadores y el Mundial de Clubes de 2012 con el Corinthians, final ganada al Chelsea.

Desde el 2016 es el técnico de la selección de Brasil y ha logrado devolver a la canarinha al lugar que le corresponde, tanto por el estilo de juego como por los resultados. Sus números al frente de la pentacampeona lo dicen todo: 25 juegos, 20 victorias y una sola derrota en un amistoso frente a Argentina.

Y no solo desde lo numérico ha sido asombroso lo de Tite al frente de Brasil. Le ha devuelto la alegría y la confianza a sus jugadores, perdida luego de los malos resultados en la Copa América en Estados Unidos y tras ese nefasto 7 por 1 contra Alemania en 2014.

Tite enderezó el camino de una selección que veía como Rusia se iba alejando. Cuando tomó el cargo, Brasil ocupaba el sexto lugar, con resultados totalmente ajenos a los acostumbrados para la selección que más mundiales tiene en la historia del fútbol.

Al finalizar la fase eliminatoria, Brasil terminó de primero con 10 puntos más que el segundo que fue Uruguay. Los números avalan el gran rendimiento de Tite, sumado al contexto a partir del cual debió asumir las riendas de Brasil, una situación llena de desconcierto y de grandes dudas.

En Rusia, Brasil llegó en condición de gran favorito junto a otras selecciones, varias de las cuales ya han tomado su tiquete de regreso a sus respectivos países. Y Brasil sigue ahí, y metiendo miedo a medida que pasa el Mundial. No solo se caracteriza por su temible ataque con jugadores de gran capacidad resolutiva, sino por una pasmosa fortaleza defensiva. Un equipo que define en cualquier momento y que además concede poco gol solo significa una cosa: un equilibrio perfecto que les permite a los brasileños soñar con su sexto mundial.

Ya instalados en cuartos, y de la mano de un técnico que ha demostrado máxima capacidad para conducir un vestuario plagado de estrellas, esperan el viernes a Bélgica, duelo que promete grandes emociones.

Brasil luce muy sólido, y con grandes chances de llevarse el Mundial de las sorpresas celebrado en Rusia.

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