Capsulas de Carreño

Aldair, un arquero macartizado.

Nacional en Bucaramanga perdió, actuación colectiva muy criticada. Foto tomada de https://co.marca.com/

Por Gilberto Maldonado Bonilla

El caso Aldair Quintana muestra el grado de fanatismo. Fanatismo que no permite ver en su real dimensión la responsabilidad en los dos primeros goles de los tres que el Atlètico Bucaramanga le aplicó a Atlético Nacional.

Mirando muchas veces y con detenimiento las acciones que ocasionaron los goles búcaros se puede colegir que la responsabilidad del arquero Quintana es «secundaria».

Responsables directos sus compañeros de defensa, los cuales le entregaron el balón a los jugadores rivales. Los goles recibidos no son consecuencia directa de las acciones de Aldair.

Pero es el precio que el arquero verde está pagando por el sentido de inseguridad que ha mostrado bajo el arco, con el agravante de sus comentarios filtrados en las redes sociales sobre un segmento de la hinchada verde.

No es esto una defensa del arquero Quintana. No voy a decir categóricamente que es un mal arquero. Eso sí, en el arco de Atlético Nacional han estado arqueros que han sido sinónimo de seguridad: Raúl Navarro, Lorenzo Carrabs, René Higuita y otros.

Un asomo de mínima justicia sería bajarle al macartismo; y mirar que Aldair Quintana es solo una parte, un accesorio, de esa máquina que no quiere marchar. Y, oh paradoja, los hinchas se están convirtiendo en la sombra de un técnico falto de autoridad que toma decisiones tocando y haciendo énfasis en la parte más podrida y deteriorada de la cadena.

Nada más injusto que la justicia humana.
[Gilberto Maldonado Bonilla].

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8 comentarios

  1. Gustavo Ruiz

    2 marzo, 2022 at 8:42 pm

    ¿ALIMENTAMOS ESO?

    Hace rato que el fútbol está alejándose de mi corazón y de mi gusto. Ya ni debatir el tema me apasiona. Tanta pugnacidad, tanta vileza, tanto culpar, juzgar y menospreciar. Tanto castigo al error por la avidez de títulos y grandeza. Y siempre lanzamos diatribas contra los hinchas fanáticos y energúmenos como los llamó del doctor Robledo. Pero si leemos nuestros propios comentarios, notaremos una tendencia a juzgar y a castigar, más que a analizar.

    Amo el juego, pero lo que gira en torno a él me asquea. Eternos debates en programas de televisión por pendejadas; qué si el técnico debe jugar con fulano o con megano, que si es mejor una camiseta azul o una blanca que si pata ti y patata; consumimos tiempo valioso para amar, bailar, acariciar y soñar,para una buena lectura o un picadito sabroso, en esas tonterias.

    Y cuando no, las noticias faranduleras estúpidas. Páginas de Facebook cubriendo ficticas rencillas pasionales de jugadores, exhibiendo cual mercancia costosa los «mujerones» de los futbolistas. Un culto al éxito que exige como retribución, muchos resultados, pocos errores y saciar el hambre de victoria de los hinchas. Y si un jugador hace un túnel, humilló al contrario, y si un equipo gana a otro se vengó o lo aniquiló. Y así se va desplegando el arsenal de violencia producto de la cultura del éxito y la dominación.

    Y hablemos de las barras; muy organizadas, pero fetichizando a su equipo. Y el argumento de que lo siguen a todas partes. Se parecen a esos amantes obsesivos que llenan de regalos a sus amadas y exigen por ello reciprocidad. Nadie los obliga a ir de un lugar a otro, una pasión no justifica los excesos en los que incurren muchos. Un equipo no es la vida, un equipo no justifica atentar contra otra vida. Eso es puro sentido común. Si usted sigue a su equipo por todo el país, pues no lo siga más y ya. Pero eso no justifica apretar a los jugadores. Yo no conozco a nadie que rinda mejor con amenazas. Esa es la hermosa pedagogía del miedo que hemos heredado de nuestros padres, maestros y autoridades.

    Hace poco leí algo que dijo Benzema. Fue premiado como el mejor jugador del partido, y él se extrañaba: -no jugué bien-afirmó- pero hice un gol. En otras ocasiones no he anotado, pero he jugado muy bien y no he sido destacado. Definitivamente los resultados y los datos, están por encima del juego.

    RECUPEREMOS EL JUEGO.
    Gustavo Ruiz

    Hincha de Nacional
    MEDELLIN

    • Rafael Ignacio Correa González

      3 marzo, 2022 at 8:08 am

      POR COMENTARIO DE GUSTAVO RUIZ
      Magnifico aporte reflexivo Gustavo, ni más ni menos.
      Rafael Ignacio Correa González

      Hincha de ATLETICO NACIONAL
      Medellín

      • Gustavo Ruiz

        3 marzo, 2022 at 2:20 pm

        EN RESPUESTA A RAFAEL IGNACIO CORREA
        Muchas gracias Rafael.
        Gustavo Ruiz

        Hincha de Nacional
        MEDELLIN

  2. Miguel Robledo Restrepo

    2 marzo, 2022 at 6:53 pm

    NO DON GILBERTO
    Malo es malo. Si Usted en su empresa tiene un trabajador que no le rinde lo reubica o lo echa y si lo quiere mucho se lo lleva para su casa de jardinero. Eso es lo que pasa con Aldair Quintana. No desdigo que sea un gran padre de familia, una gran persona para la sociedad, para los suyos y otros pero es muy mal portero.
    Miguel Robledo Restrepo

    Hincha de Club Atlético Nacional
    Montebello - Antioquia

  3. Rodolfo Serrano

    2 marzo, 2022 at 10:57 am

    CASO ALDAIR QUINTANA
    Esto que han hecho algunos hinchas con Aldair Quintana no tiene nombre. Es una bellaquería de la peor bajeza. Maltratar a una persona porque ha tenido equivocaciones, como las tenemos todos en nuestro diario vivir, sin detenerse a pensar que es un ser humano que sufre junto a su familia, indica crueldad y falta absoluta de solidaridad humana.

    Esperemos que Aldair se recupere en su parte emocional y pronto vuelva a ser la persona que fue hasta que le sucedieron esos malos momentos y ya sea en Nacional o en cualquier otro equipo, muestre de nuevo sus grandes capacidades, que lo llevaron a ser llamado a la selección Colombia.
    Rodolfo Serrano

    Hincha de Nacional
    Bogotá

    • Miguel Robledo Restrepo

      2 marzo, 2022 at 4:32 pm

      EN RESPUESTA A RODOLFO SERRANO
      No Señor.
      No es ensañarse en una persona por serlo. Es juzgar a un deportista de alta exigencia que repetidamente ha cometido el mismo error. Él tiene entrenadores y preparadores que deben haberle enseñado cómo responder a situaciones extremas como la de la catástrofe.

      Y el portero debe aprender de sus predecesores porque esto le sucedio a Monetti y a Cuadrado y Quintana lo presenció. Quien no aprende de los errores ajenos está propicio a cometerlos. El fútbol es un deporte de alta competencia que raramente perdona loe errores. Por menos faltas lo echan a uno de una empresa y si es recaída, con mayor razón. Que recapacite si es apto para ser portero de fútbol profesional. O que cambie de oficio. Y no es encono, es cantar la tabla.
      Miguel Robledo Restrepo

      Hincha de Club Atlético Nacional
      Montebello - Antioquia

    • Miguel Robledo Restrepo

      2 marzo, 2022 at 4:40 pm

      EN RESPUESTA A RODOLFO SERRANO
      Si Usted es conductor de un tren y una vez se sale de la ruta y choca y causa 10 muertos lo califican de accidente fortuito. Pero si el caso se repite se convierte en homicidio culposo y eso fue lo que cometió Quintana. Ese balón tenía qué reventarlo. La defensa desiste de presentar sus descargos.
      Miguel Robledo Restrepo

      Hincha de Club Atlético Nacional
      Montebello - Antioquia

      • Rodolfo Serrano

        3 marzo, 2022 at 3:27 pm

        EN RESPUESTA A MIGUEL ROBLEDO RESTREPO
        Critíquelo como portero de un equipo de fútbol y pida que lo despidan, lo cual es muy diferente a ensañarse con él. En eso vemos la situación de un modo opuesto, para usted hay que sacarlo a como de lugar, así sea acudiendo a métodos crueles y humillantes de la persona, como que las barras se dediquen a insultarlo cada vez que le llega el balón o a destrozarlo en las redes sociales catalogándolo de inepto y mediocre. Todo con el fin de que si los directivos no lo sacan, porque al fin y al cabo es un activo de la institución, él tome la iniciativa y se vaya humillado y ofendido. Y recuerde señor Robledo, no todas las personas son iguales y no resisten lo mismo las críticas indolentes.
        Para mi basta con que lo saquen del equipo si no les parece merecedor del puesto, sin necesidad de maltratar al ser humano. Uno debe tener un poco de humanidad en el trato hacia los demás y criticarlos en su trabajo sin llegar a la ofensa o la agresión.
        Rodolfo Serrano

        Hincha de Nacional
        Bogotá

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