Capsulas de Carreño

El divorcio de Amaral

Por Rafael Villegas.

 

 

 

 

 

*Poco a poco el espejismo de Amaral como buen técnico se fue diluyendo.
====

El romance de Amaral con la hinchada de Nacional está durando bien poco, y como sucede en muchos matrimonios, se va deshaciendo por diferencias irreconciliables.

Amaral llegó de carambola a ser el técnico titular del verde por la salida precipitada de Autuori, quien nunca congenió por su manera de ser y su prepotencia con el hincha verde. Su futbol defensivo, su vértigo en salidas de ataque que terminaban en poco, su actitud corporal en el banco y la pérdida del título con justificaciones conformistas de su parte, llevaron al hincha a desear que el brasilero se marchara cuanto antes.

Poco a poco el espejismo de Amaral como buen técnico se fue diluyendo.

Y se marchó, pero increíblemente la dirigencia de Nacional prefirió la continuidad a la renovación en el banco técnico con Amaral, que pocos conocían mientras estuvo Autuori y el hijo de este Caio Mello

Al comienzo, como en casi todos los romances, las dos partes se acaramelaron, Amaral ganándose al hincha, primero con una versión totalmente diferente del verde en el campo, un equipo más propositivo y con la presencia de jugadores juveniles que alimentan la ilusión de futuro en el equipo. Amaral, muy inteligentemente así lo hizo y lo adobó con su presencia en la tribuna como un hincha más. Digamos que Amaral y la afición vivían una luna de miel.

¿Pero qué pasó? Que el futbol es de resultados y de propuesta. Los primeros comenzaron a decaer cuando Nacional no ganó compromisos importantes frente a rivales tradicionales: América, Medellín y Millonarios, además de la serie con Racing en la Libertadores donde el equipo fue eliminado sin discusiones.

Poco a poco el espejismo de Amaral como buen técnico se fue diluyendo… y el simpático brasilero comenzó a dejar disolver su imagen por la necesidad de sumar puntos. El equipo volvió a ser temeroso en el campo, con poca elaboración y atropellado en ataque, aparte de los inmensos yerros defensivos, donde el decrecimiento de rendimiento de sus jugadores es notorio.

Ahora bien, la gota que rebosa la copa y está llevando al divorcio de la afición con su entrenador ha sido el papelón frente al América cuando el equipo fue humillado por uno de sus más históricos rivales. Allí ha sido troya. El hincha se sintió humillado y traicionado.

La prensa en su labor entró a cuestionar al técnico planteándole la posibilidad de su renuncia y el técnico contestó contrariado asegurando que la prensa no era seria al hacer ese tipo de cuestionamientos; que Nacional está arriba en la tabla y que ese tipo de interrogantes no le ofrecían nada al conocimiento del futbol para los hinchas.

¿Es decir, y así lo entiendo, Amaral pretende que después de una derrota como 4×1 con América el periodista le pregunte sobre unidades de entrenamiento, le justifique la presentación para maquillar lo que ha sido una vergüenza de resultado, primero para el equipo y luego para sus hinchas?

No profe Amaral, así no es. Este equipo es un cuadro con historia que quizá usted, como Autori, no han dimensionado. Nacional ha sido un equipo grande antes de la llegada de ustedes y si usted no lo entiende y asimila, el divorcio total y la separación de cuerpos con la hinchada se ve llegar… por diferencias irreconciliables.
[@lidervillegas
@colombiasports]

Compartir:

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *