Capsulas de Carreño

La purgada…. Por Jorge Iván Londoño

Por Jorge Iván Londoño

*Y la hinchada a arropar la institución desde la silla que cada quien utilice para hacerlo, con el sentimiento adicional del amor propio herido.

Cuando muchachos, salíamos a vacaciones del estudio y lo primero que hacían nuestras mamás era purgarnos, desde el mayor hasta el menor, y mejor no entremos en detalles. Eso sí, quedábamos estrenando tripas y listos para otros seis meses de siembra de parásitos, por no decir lombrices que suena a “guácata”.

Nacional salió a vacaciones anticipadas en diciembre pasado, gracias a las finas atenciones de sus jugadores, y de inmediato la Federación Colombiana de Fútbol, fungiendo como mamá, lo purgó, y con doble dosis.

Esa purgada ha servido para desparasitar todos los órganos de la institución, incluida la hinchada.

Los dirigentes se tuvieron que poner el delantal, y comenzar a revisar contrato por contrato para no encontrar “entuertos”  parecidos al que originó la purgada, relacionado con los tejemanejes de las negociaciones del tal Fernando Uribe.

Así mismo, la purgada ha servido, y de qué forma, para salir de los Monetti, los Braghieri, los Torres, los Lenis, etc., etc., y para expulsar la política de prestar un ejército de jugadores, casi que gratis a otros equipos. Para terminar los contratos laborales de muchos de esos jugadores, y para repatriar jugadores que vivían en casas ajenas, y volverlos a arropar como a los hijos pródigos cuando regresan.

Ojala esta purgada sirva igualmente para que Nacional expulse la política de traer jugadores “insinuados” por mercaderes del fútbol, con contratos firmados a años luz y refrendados por millonadas; y en cambio formalice, cuando se pueda volver a hacer, contratos responsables y serios, en los que ambas partes ganen, y sin poner en riesgo las finanzas de la institución.

Por parte del equipo, y luego de esa “deposición”, quedaron poquitos pero benditos, situación que los obliga a ponerse igualmente el delantal para jugar como obreros de pico y pala, y demostrar que tienen espíritu de lucha, y que el amor por la camiseta y club está por encima de la tarjeta débito.

La purgada sirvió para arrimar los mejores muchachos de las divisiones inferiores al equipo profesional, y darles la oportunidad, por fin, de tragarse la cancha y conquistar la gloria.

El cuerpo técnico, apoderado de la situación, deberá sacar a relucir, con la escasa materia prima que le dejaron, todo su bagaje, experiencia y conocimientos, y empoderar a  cada jugador en su rol. Toda la confianza en el señor Autuori.

Y la hinchada a arropar la institución desde la silla que cada quien utilice para hacerlo, con el sentimiento adicional del amor propio herido.

Así las cosas, ¡bienvenida la purgada!

POSDATA

Buenas tardes apreciado Sr. Jorge Iván,

A nombre propio y del Club Atlético Nacional quiero agradecerle las reflexiones plasmadas en la columna Cápsulas de Carreño. Opiniones como la suya rigurosas, críticas, pero con alto sentido de objetividad y respeto son las que nos invitan a seguir trabajando fuertemente para superar la actual situación.

Fuerte abrazo.

 Cordialmente,
Juan David Pérez Ortiz

Compartir:

6 comentarios

Dejar una respuesta

Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *