Capsulas de Carreño

Alexis García: Fútbol desde valores. Conversatorio UPB – Cápsulas

Por Liceth Daniela Torres.

 

 

 

Alexis García, ex futbolista y actual director técnico de La Equidad, hizo parte de la serie de conversatorios virtuales de Fútbol sin tapabocas, realizados por la Universidad Pontificia Bolivariana en alianza con Cápsulas de Carreño.

En esta charla el objetivo era abordar al fútbol, no desde la táctica y los conceptos, sino desde los valores, los sueños y la formación humana, esto a propósito del lanzamiento del libro escrito por García llamado Maestro fútbol.

MÁS QUE UN PARTIDO

Durante la charla, Alexis García confesó que desde hace tiempo tenía la idea de escribir sobre la experiencia mágica que ha tenido con el fútbol. “Sentía que debía escribir sobre lo que yo viví, más que una autobiografía, escribir unos aspectos en los que se identificara la gente, no solo del fútbol, porque hay gente que no está en el fútbol, pero que también está librando batallas y superando cosas todos los días y requiere los principios de éxito que te regala el fútbol y que son aplicables en cualquier aspecto de la vida”, expresó García.

El fútbol es más que un partido, un campeonato, una alineación o un sistema táctico, para Alexis García, el balompié es un vehículo de formación en el que se aprenden valores como la disciplina, la responsabilidad, el cumplimiento y el trabajo en equipo. El mismo técnico reconoce que, aunque la gran mayoría de jóvenes que pasan por una escuela de fútbol no llegan al profesional, este deporte siempre les deja una base sólida de valores que los conduce hacia la posibilidad de ser mejores personas y hacia un camino para ser felices.

A su vez, García reconoce que no tener una base sólida es la que puede arruinar la carrera profesional y la vida de un futbolista, “La altura hace mucho daño para el que no está preparado”, sentenció García a modo de metáfora en referencia a una anécdota ocurrida en Bogotá para hablar sobre la poca preparación que tienen los jugadores jóvenes sobre cómo abordar el profesionalismo y sus consecuencias: el dinero, la fama, los amigos de ocasión y las oportunidades nocivas. Pero resaltó lo gratificante que es poder ofrecer afecto y formación para que los deportistas sepan cómo sortear esas situaciones cuando lleguen a ese sitio al que es tan difícil alcanzar.

Como dice Alexis García, es más importante la persona que el personaje y cuando el ser humano se alimenta de información de valor, el personaje, que puede ser un futbolista profesional, también crece de forma positiva, por esto, el “Maestro” expresó que siempre se ha preocupado por la lectura y por aprender y el fútbol no ha sido la excepción para nutrirse. “Yo al fútbol lo tomé como un maestro, para mí el juego fue pedagógico a través de toda mi vida porque el juego era para mí un vehículo en el que, primero podía estar en el lugar más feliz en el que he estado en mi vida que es en una cancha de fútbol, segundo, compartir con un elemento que parecería inanimado pero que para mí cobraba vida y que es el balón con el que siempre tuve mucha complicidad”, agregó el ex jugador de fútbol.

La historia de complicidad y magia entre Alexis García y el balón de fútbol empezó en la niñez, en el barrio La Floresta de Medellín, un barrio tradicionalmente futbolero pero que no estaba exento de las problemáticas de la ciudad en la que había dos caminos, el sano y el nocivo. Desde ese momento, el pequeño Alexis se aferró, junto con algunos amigos del barrio, a la pelota, al mejor camino.

“Yo tuve muchos retos, en mi barrio no solo era el más pobre sino también el negrito, entonces era un poquito rechazado por las dos cosas. Lo del color de mi piel, pues aprendí a enorgullecerme de él y lo de la pobreza sabía que era temporal y que venía mucho de mi manera de ser y de pensar y entonces me dediqué a soñar. He sido un soñador toda la vida, por eso me denomino un entrenador de soñadores, una persona que se encargó de construir caminos paralelos y de caminar hacia ellos y afortunadamente el fútbol me llevó ahí a través de todo lo que viví en mi barrio”, recordó Alexis.

EL COMIENZO DE UN AMANECER

Por eso, en honor a su niñez, el primer capítulo de su libro se llama El comienzo de un amanecer, donde cuenta como amanecía su vida cuando era un niño que soñaba con el fútbol, aunque no hubiera cancha, ni balón. “Manteniendo un sueño en el yo iba al Atanasio Girardot y como no podía entrar, me quedaba afuera escuchando los sonidos del fútbol y soñando, creando, visualizando lo que podía pasar y afuera cantaba el himno nacional como si fuera un jugador de fútbol”, añadió el Maestro.

Afortunadamente para Alexis García, su sueño de la infancia se hizo realidad y pudo convertirse en futbolista profesional. Su paso por el balompié colombiano no solo le dejó felicidad, triunfos, enseñanzas y anécdotas, también le dejó marcas de personas importantes como Francisco Maturana, René Higuita y Andrés Escobar, cada uno de ellos tiene un lugar especial en su vida y un espacio importante en su libro.

A Francisco “Pacho” Maturana lo denomina como un prócer del fútbol profesional colombiano por haberle dado una mirada holística, un sello, una cultura y un estilo para ser mostrado ante el mundo.  Por su parte, René Higuita es un amigo de la vida del que destaca su genialidad y originalidad y al cual ha acompañado en momentos felices y situaciones difíciles.

Por último, sobre Andrés Escobar expresó que “fue un ser humano especial, con el que hice una amistad afuera de las canchas donde teníamos sensaciones similares, donde hacíamos obras sociales en privado los dos… nos unían unas cosas altruistas, unas cosas que nada tenían que ver con el fútbol pero que nos llenaban el espíritu y eso nos unió demasiado. El golpe de su partida me dejó tan marcado… lo mantengo en el corazón, más en las fechas que se acercan los aniversarios y quería plasmar y compartir con la gente todo lo que siento por un ser humano como Andrés Escobar”.


UNA PEQUEÑA MUERTE

Después de todo un recorrido como jugador, llegó la noche, la hora del retiro, a la cual Alexis García denominó como una pequeña muerte, ya que se deja de lado esa niñez, ese constante romance y juego con la pelota para dar paso a una vida adulta. Alexis confesó que “No es sencillo el día en que llegas a jugar tu último partido y el día después es peor. Cuando ya no te tienes que levantar a cumplir con unos reglamentos, cuando ya no te hacen todas las cosas porque al futbolista le hacen todo, le sacan el pasaporte, le compran los tiquetes, le cargan los guayos, casi que vives en una burbuja que se explota el día que te retiras de jugador de fútbol y entras a la realidad de la vida que es otra, porque ya la vida está más allá que el rectángulo de juego y las decisiones corren ya por cuenta tuya y tienes que empezar a enfrentar lo que vives”.

Aunque el retiro significó tener más tiempo para su familia, no volver al estadio como jugador y dejar de lado el encuentro con los hinchas fue todo un drama, sin embargo, Alexis confiesó que todavía se siente un jugador de fútbol y declaró que vivió agradecido porque le pagaban por jugar. “Para mí era una dicha que me pagaran por jugar, eso es un lujo que muy poca gente se puede dar, que el trabajo sea jugar, que miren lo que haces mientras vos te devertís y te contás secretos con la pelota, para mí yo nunca me sentí jugador profesional, me sentí un jugador amateur que disfrutaba todos los días a entrenar”.

Afortunadamente para Alexis García, el retiro no significó alejarse del fútbol, el paso por Atlético Nacional como gerente de divisiones inferiores fue uno de los primeros pasos para llegar a la dirección técnica, a la formación de jugadores. Su deseo por formar personas también lo motivó a crear la escuela de fútbol que lleva su nombre y que en sus casi 30 años de fundación ha impulsado la formación de talentos deportivos y sobre todo de seres humanos soñares y llenos de valores.

“El fútbol para mí siempre fue eso, no solamente un vehículo pedagógico sino un vehículo que me llevó a la felicidad y a la formación… Es cierto, es un camino que requiere resiliencia, perseverancia, pero yo digo que los sueños cuando son sueños bien confeccionados y bien consolidados siempre van a encontrar el camino, yo en este caso encontré el del fútbol y fue un camino que me permitió salir a mí y sacar a mi familia de la pobreza y a ascender social, espiritual y personalmente. Además, me generó un compromiso con la vida, un compromiso en el que me veía abocado a tener que ayudar a otros a recorrer ese camino que yo había recorrido para ayudarles a llegar lejos y gracias a Dios por eso monté una escuela de fútbol y lo logré”, expresó García.

Por último y a modo de cierre, Alexis García expresó que el fútbol tiene magia y funciona como un acróstico en el que cada letra tiene un significado:
Mejoramiento continuo
Actitud,
Gratitud,
Inteligencias
Amor.
“Los cinco componentes que te hacen un ser humano especial, cuando lo sabes aprovechar en un deporte tan generoso como este, tan lleno de valores, lo único que hace es permitirte vivir la vida a pleno”, concluyó, en una charla en la que a través de sus palabras, como de su libro, pretende proponerle a los escuchas y lectores a soñar en grande, a creer en las oportunidades y a no rendirse jamás.

Compartir:

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *