Capsulas de Carreño

Claro que teníamos con qué soñar (Jorge Iván Londoño Maya)

Jorge Ivan LondoñoPor Jorge Iván Londoño Maya

*Pedimos que los jugadores elegidos hagan propios los sentimientos y los deseos de todo este pueblo colombiano.

Era obvio que antes de comenzar  la Copa América, el 101% de los colombianos soñáramos con un buen papel de nuestra selección. Y es que teníamos argumentos de sobra y de peso para hacerlo, logrados en el mundial Brasil 2014. Repasemos: Quinto lugar, un rendimiento del 80%, con el goleador a bordo, la valla menos vencida, el tercer mejor gol diferencia (+8) y de ñapa el exquisito juego que cautivo a propios y extraños. Entonces, no era utópico ilusionarnos con llegar, por qué no, a la final, y menos que se nos prohibiera pensar en grande.

Obviamente, en ese orden de ideas, también nos ilusionamos con ganarle a Venezuela, así los juegos anteriores no avalaran nuestro deseo. Sabíamos que la “vinotinto” era hueso duro de roer, pero aquello de llegar a perder, tampoco pues.  Pero los partidos hay que jugarlos, y al despliegue  y patriotismo que esgrimieron los venezolanos, súmele la disposición táctica con la que el técnico Sanvicente encaró el partido, de lejos muy superior  a lo dispuesto por Pékerman, quien, por lo visto, asumió este partido como si fuera un amistoso más.

Ya nos rasgamos las vestiduras, y cuerpo técnico, jugadores, hinchada y periodismo, nos hemos cogido de la mano para conformar un frente común frente a Brasil. Para este segundo partido ya no dependemos del pasado glorioso sino de la garra criolla y del sentimiento patrio herido. Hoy más que nunca debemos vencer  Brasil, nuestro eterno Goliat, y así Yepes no esté, esperemos que por fin… sí sea gol de Yepes

Quieran los dioses del Olimpo que don José y sus asistentes dispongan de un criterio profesional para elegir  los jugadores apropiados para cambiar este momento aciago, y que además planifique el juego ajustado a las características del contendor de turno,  y no a lo que vaya resultando con el transcurrir de los minutos.

Pedimos que los jugadores elegidos hagan propios los sentimientos y los deseos de todo este pueblo colombiano que todavía tiene un chorro de esperanza en sus capacidades y en su entrega.

“No está muerto quien pelea”

Compartir:

2 Comments

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *