Como recreo de primaria.. Por Jorge Iván Londoño Maya.

Por Alfredo Carreño
Actualizado: 22 octubre, 2018

Por Jorge Iván Londoño Maya

*Que lo mostrado en los dos últimos partidos, se repita en los tres que faltan por la Liga y en los dos de la Copa.
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Posiblemente el título de mi comentario resulte extraño, pero lo escogí para calificar el juego de nuestro Nacional del momento, producto sin la menor duda, de las acciones realizadas por parte de los directivos, conocidas unas y calladas otras, pero que en buen momento han llegado, así no haya sido con la anticipación requerida, para poner orden en la casa que nos estaban patasarribiando. Sin dejar de reconocer que falta por sacar reblujo de las piezas de atrás.

El partido contra el Junior, nos dejó ver, sobre todo en el primer tiempo, a un Nacional con los ímpetus de un recreo de primaria y con una expresión futbolística distante de la rígida y cariseria de meses anteriores.

El alza en el juego de los Vladimir, los Candelo, los Machado y los Duarte, con un Braghieri y un Castellani algo más aplomados, así el primero nos haya hecho tragar el buñuelo entero, la entrega y el pundonor de Helibelton, la solvencia de Jorman y Aguilar, los buenos momentos de Vargas, la experiencia de Aldo y la “agachadita” del travesaño, se confabularon para mantener la paternidad sobre el otrora ¡tu papá!

El arriero Herrera, contra todos los pronósticos, le está sacando jugo a su cuartico de hora, impregnando al equipo con un juego exquisito, sencillo y solidario, vía expedita para recuperar la marca registrada de Nacional en su estilo, borrado del mapa por….deje así.

Nacional ha superado con creces el partido crucial ante los tiburones, y con ello ha demostrado que tiene harina, huevos y levadura para amasar la final de la copa Colombia que tendrá este miércoles el partido de ida contra el Once Caldas, y la eliminatoria de la liga, la que tenemos a medio tabaco de distancia.

Eso sí, le queda al cuerpo técnico y a los jugadores la tarea de buscar soluciones para afrontar la arremetida del equipo contrario, cuando se le puya con un gol en contra, porque el Junior, aún con un hombre menos, se escrituró el campo de Nacional para lograr el empate, arremetida que por fortuna, y salvo dos errores, fue muy bien controlada por la retaguardia verde.

Que lo mostrado en los dos últimos partidos, se repita en los tres que faltan por la Liga y en los dos de la Copa, que muchos verán como de aguardiente, pero que a la larga da como premio el ingreso a la copa de copas, la Libertadores.

Y que viva el recreooooooo…