Después del susto que llegue el gusto.

Por Alfredo Carreño
Actualizado: 4 abril, 2021

MEDELLÍN. Hubo que llegar al minuto 90 para sentir la tranquilidad que genera la amplitud del marcador. Foto @Dimayor.

—

Por Jorge Alberto Cadavid M.
Columnista Cápsulas.

*Con la clasificación en la mano, el reto viene ante Libertad en la Libertadores, para más gustos en lugar de sustos.

—

Así hay que ver esta contienda ante el Envigado, hubo que llegar al minuto 90 para sentir la tranquilidad que genera la amplitud del marcador.

El golazo de Chacón, que marca su primer punto a favor desde su vinculación, mitigaba el mal comienzo de Nacional.

Se mostraba impreciso, lento e inofensivo, el juego directo del naranja generó más peligro, que el fútbol de proceso que practicaba el verde.

Nacional era predecible, aunque era dueño del balón y del terreno, pero permitía rearmar al visitante para controlar las llegadas del local.

El problema era que terminaba jugando por dentro, sin ampliar la cancha, Castro no desarrollaba sus virtudes, Candelo no llegaba al fondo para producir sus centros precisos, Álvez llegaba y tenia opción pero no era eficaz.

La mínima diferencia seguía pesando, a pesar de los cambios en la complementaria y a pesar de que el dominio se asentó a favor del verde, el juego lo abrió por lo largo y ancho del campo.

El gusto llegó con un golazo sobre el minuto 90, elaborado por Andrade, desbordando por derecha, llegada al fondo, centro y Duque que ya había errado, acertó de cabezazo.

Y el gusto fue mayor cuando Duque le devolvió el favor a Andrade, gol o autogol?

Con la clasificación en la mano, el reto viene ante Libertad en la Libertadores, para más gustos en lugar de sustos.