De penalti iba a ganar un partido insulso y de penalti, en el último suspiro, se lo dejó por el camino. No supo, no alcanzó, a resolver el partido después de que Messi lograse el 1-0 a la media hora y acabó hundido cuando el Cádiz, sin nada a perder, buscó el empate en la recta final. Un penalti ridículo de Lenglet permitió el gol de Aléx Fernandez y derrumbó al Barça.
El equipo de Koeman podía colocarse a seis puntos del Atlético y a tres del Real Madrid (este con un partido más) después de un fin de semana en que la mayor noticia era el resultado del Metropolitano. Al KO colchonero respondió con una victoria sin brillo el Madrid en Valladolid y no supo hacerlo el Barça No supo. Lamentable.
Un ridículo sin paliativos, un ridículo enorme de un equipo sin ritmo, sin juego y sin ambición, que parecía tener suficiente con ganar de manera oscura y pagó su mala actuación con el empate final. Un paso atrás, otro, que a saber qué consecuencias tendrá porque hay veces que no basta con rematar hasta 24 veces a puerta, sino que se debe jugar al fútbol. Y jugar es más que tocar y tocar sin más.
Koeman le dio confianza al mismo once que el martes fue arrasado por el PSG. Repetir la alineación pudo inerpretarse como un signo de confianza o como un aviso de que debían ser los mismos jugadores los que cambiasen la imagen europea. Y como el Cádiz no se parece en nada al PSG, habrá que dejar para otra ocasión cualquier conclusión.
(Fuente: ESPN)
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RESULTADOS
(LaLiga Santander – Fecha 24)
Domingo, 21 de febrero