Nacional es un equipo sólido. Por Miguel Robledo Restrepo

By Alfredo Carreño
Updated: 28 febrero, 2018

Por Miguel Robledo Restrepo

*El de anoche, de la mano de Almirón, jugó su mejor partido del año y lo ganó con sobrados méritos.
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Es un equipo serio, solvente, que sabe a qué juega y qué quiere.

El primer tiempo lo jugó a defenderse y a dejar aproximarse al rival, pero sólo hasta cierto punto. Con un planteamiento bien inteligente de 3 defensas que dejó siempre a uno de ellos libres y cubriéndose bien las espaldas. Dos laterales volantes de ida y vuelta, con un volante central, Bocanegra, un creativo y tres delanteros nominales ya que Vladimir jugó muy retrasado. En defensa hubo pocos problemas pero también hubo una lánguida aproximación al arco de enfrente. Primer tiempo con arco en cero es un buen marcador.

En el segundo tiempo apareció la muñeca del técnico al hacer cambios tácticos muy productivos. Bocanegra ya había tenido un despiste; Renterìa estuvo encerrado entre los centrales y Lucumí fue impreciso cuando atacó.

Ingresan Campuzano por Bocanegra y Castellani por Lucumí con lo que Nacional retrasa sus líneas y se apodera del terreno y del balón, sin regalarse, más bien, apuntando al contragolpe pues Renterìa y Vladimir tuvieron lo que les gusta y necesitan para producir: espacio. Y así llegó el gol. Un error de Aguilar es enmendado por Campuzano quien en un gran gesto técnico retiene el balón y avanza raudo hasta que ve a Vladimir picar mientras Renterìa distrae a la defensa. Espectacular pase para que Vladimir haga su diagonal hacia afuera, eluda al arquero y cruce el balòn al àngulo màs lejano del portero colocolino. Y, a celebrar.

El ingreso de Aldo por Vladimir fue para asegurar el resultado y para proteger al superdotado de la guadaña a que lo sometieron durante todo el partido. Si recibe leña el chiquitín…

Aparte, Muy bien por los centrales, impecables e impasables los tres; Henríquez en un nivel superlativo y Braghieri demostrando a qué vino. Sorprendió gratamente Macnelly, no por su talento al que estamos habituados sino por su gran estado físico y su capacidad de sacrificio.

En resumen, el partido lo ganó Almirón, apoyado en una excelente plantilla que ya sabe lo que quiere el técnico y está aprendiendo cómo aplicarlo en la cancha.
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