Nacional puso al Galeras con fumarola Verde

By Alfredo Carreño
Updated: 24 noviembre, 2024

Por esta mano, Joan Castro vio la amarilla. Fue inicialista por Felipe Aguirre (suspendido) y no salió en la complementaria para dar paso a Juan José Arias, de buen comportamiento. Victoria justa de Nacional 1×0. Foto @Dimayor.com.

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Por Jorge Iván Londoño Maya.
Columnista Cápsulas.

Por fin nos correspondió un horario decente para ver a Nacional encumbrado en los 2.527 metros de altura de la ciudad de Pasto, y apapachado por El Galeras, para jugar contra los pupilos del técnico Florentín, de acento paraguayyyo.

Tarde soleada, con tribuna exclusiva para los del sur, que está vez sí que lo fueron. Quien sabe en donde se metió Juárez para dar instrucciones no propiamente por el sistema morse a su compañero Luis Pérez, favor no confundir, quien desde ya y por sécula seculórum, “mojará” raya; pues, si persiste la sanción por tres años para el técnico manito.

Nacional, que juega con su hábito oficial, no pierde la fe y repite la nómina que goleó a los cardenales, excepto Aguirre, que salió por doble amarilla, reemplazado por Castro.

El primer susto lo propicia Marino, quien en una veloz descolgada pasa como pepa´e guama por entre varios pastusos, pero pierde el equilibrio, se dobla el tobillo y queda tendido. El médico entra sin permiso a atenderlo lo que le merece la amarilla, es sacado en andas, pero dos minutos más tarde aparece bien orondo. !Uffff¡

En los primeros 20 minutos el Pasto domina, sobre todo por la banda derecha. Ospina comienza a mostrar su jerarquía, sobre todo con la voladora para despejar un balón rastrero.

Minuto 22 y llega la jugada de antología, en la que intervienen Ángulo, Ceppelini, Morelos, Román, Marino y Guzmán que manda el balón al fondo de la red con un tiro bien colocado. Celebración hacia la cámara y luego entre todos conforman un grupito como de liberales en el atrio de la iglesia de Marinilla, apretujados y hablando para el piso; porque de lo contrario, quien sabe conque sale la comisión disciplinaria. Mientras tanto, Luis, el técnico encargado, se limitó unos abrazos normales con sus compañeros. El partido sigue en la misma tónica, Nacional se repliega y deja que el Pasto despida humo y centros a lo Galeras, es decir, por lo alto.

Para el segundo tiempo, además del humo verde nacionalista y el rojo pastuso, entran Arias y Cardona por Castro que tenía tarjeta amarilla, porque juega mejor cuando se la sacan, y por Ceppelini que se tragó la cancha. Cardona pudo jugar porque gracias a los días de aniversario le perdonaron una fecha de suspensión. También entra una enorme sombra en la parte occidental del estadio La Libertad, obra y gracia de “Cuando el sol declina”, que perjudica la imagen de televisión. Pero a veces es bueno imaginarse que está pasando.

Aún Pasto con más posesión del balón, es Nacional el que tiene mejores opciones de aumentar. Recuerdo ese tiro libre cobrado por Cardona que le tiró un “mua” al rincón de las telarañas. Así mismo, en un contragolpe comandado por Morelos, le hace el pase a Cardona, quien trata de bañar al portero pero el balón pega en la humanidad de éste. ¿Y qué tal el cabezazo de Tesillo con el arco a disposición, y lo eleva?

Asprilla y Cardona se encargan de armar su fútbol sala en el banderín suroccidental para que el tiempo corra. El árbitro Santiago adiciona 4 minutos, los mismos que se consumen como la tarde, sin ningún sobresalto.

Gratificante triunfo y perfecta campaña que deja a Nacional líder de la tabla con 6 puntos y una diferencia de gol de 6. El próximo partido será frente a Falcao y su corte, pero antes ellos tendrán que enfrentarse al león herido y humillado de Santa Fe, cuyo técnico, más el jugador Perlaza, esta vez no tendrán motivo para fabricar pantomimas, tal como lo hicieron en el Atanasio para presionar la expulsión del técnico Juárez; además, saben de sobra, que si pierden quedan con las llantas de adelante sobre el precipicio.

Los jugadores, cuerpo técnico, directivos e hinchada, recibimos este triunfo nacionalista con beneplácito, y como paliativo por todo lo que ha sucedido. Así mismo, vemos con buenos ojos el fútbol que se está practicando, la entrega y la unión del grupo, fundamentales para volver a conformar la familia verdolaga.

“Individualmente somos gota, juntos formamos un océano”. Ryunosuke Satoro.