Nacional y sus dos episodios de laguna mental

By Alfredo Carreño
Updated: 30 noviembre, 2024

Leonardo Castro aprovechó regalo en bandeja de plata de Edwin Cardona para abrir la cuenta. Foto @Dimayor.com.

======

Por Jorge Iván Londoño Maya.
Columnista Cápsulas.

El Nemesio se vistió de banderines azules y blancos para decorar el clásico de siempre, el de la rivalidad, el que despierta otro tipo de pasiones. La noche anterior, la hinchada verdolaga, que es la más numerosa de las “extranjeras”, le había dado señor banderazo al equipo a sabiendas de que no podían ingresar al estadio.

Llama la atención de que Falcao no sea inicialista, pero eso no impide que su encuentro con David Ospina se haya fundido en un abrazo de amistad, como referentes de nuestra selección. También, pero menos efusivo, fue el saludo entre Gamero y Juárez.

Comienza el partido bajo la ceremoniosa dirección del árbitro Hinestroza. El saque le corresponde a Nacional, que cambia el libreto, porque del largo pase arriba sale jugando en corto. Al minuto 2 Cardona le hace el pase cuchareado a Guzmán, quien no logra recepcionar debido a la inexactitud, y quien recibe el balón es nada menos que Leo Castro, saca una potente media volea y vence a Ospina para el primero. Fina atención pues del capitán verde, jugador curtido y reconocido por sus pases, pero esta vez no atinó. Baldado de agua helada.

Menos mal Nacional no se descompone, se abrocha la chaqueta, se sube el nudo de la corbata y comienza a hacer su juego ante el relax embajador. Mucha posesión pero poca profundidad. En el cobro de un tiro de esquina por parte de Cardona, se repite lo que ya es habitual en esa plaza, el lanzamiento de “cositas” y ésta vez le agregan los insultos raciales más los madrazos envueltos en huevo para Marino, quien se descompone, pero entre Cardona, Guzmán, Ospina y el árbitro Hinestroza, que hace de papá, lo calman.

Llega el minuto 27, Tesillo sale del fondo, pase a Marino, éste a Morelos que sigue raudo, Marino se cruza al otro lado, centro de Morelos y gol de Marino para el empate. Guzmán corre donde Marino y en medio del abrazo, que más parece una apercuellada para que no se vaya a descomponer y haga locuras, pero aun así, nuestro gran jugador, pero igual de díscolo, va hasta la esquina y con el banderín de millonarios se limpia la boca, lo que origina la protesta del público, de Gamero y Jugadores y claro….tarjeta amarilla. De igual forma, en el banco los asistentes del técnico hacen las veces de guardaespaldas y abrazan con más fuerza a Juárez, para que no se le vaya a salir el espíritu cantinero mexicano. ¡Válgame Dios!

Este gol despierta a Millonarios, que también se vuelve protagonista del juego, partido que se pone de ida y vuelta, y manda los equipos al camerino para recibir la hidratación y la homilía de los técnicos.

Para el segundo tiempo entran en Millonarios Falcao y Cataño que luce un estrambótico corte de pelo, teñido de color de burro al trote. Una de sus primeras jugadas fue lesionar a Sarmiento, por lo que ni siquiera recibió una penitencia de rezar un Padre Nuestro.

Al minuto 30 Asprilla anota de tremendo rebote, pero el gol es anulado por fuera de lugar de Morelos, quien tenía adelantada la punta de la suela del guayo, con relación al último defensa. Lo que no se anuló fue la tremenda voltereta para celebrar el gol, el mejor estilo de Simone Biles.

Minuto 80, Ospina salva a Nacional con una manotazo hacía atrás generado por un tiro de Giordana, que da lugar a cobro de tiro de esquina; cobra Cataño, el balón llega derecho y bajito al área, Ospina sale al bulto y el balón pega en la cabeza de Macalister y se mete en la red para darle los 3 puntos a Millonarios. “Macka” como también le dicen, no lo podía creer y preguntaba ¿Cómo lo hice?

Este martes será la revancha en el Atanasio, con los mismos actores y los mismos favores en cuanto a hinchada, y con las ausencias de Román, expulsado al minuto 89 por jugada peligrosa, y de Leo Castro, quien ajustó la quinta amarilla.

Será el partido clave para devolver favores, para lograr el triunfo con el fin de mantener las aspiraciones verdes de ser finalista del grupo, y para recuperar la confianza, el buen fútbol y la contundencia goleadora. Habrá pues comunión entre equipo e hinchada.

“Es duro caer, pero es peor no haber intentado nunca subir”, Theodore Roosevelt.

← Previous Story Millos: golpe de suerte o golpe de opinión (Cápsulas)

Next Story → «Mono» a Marino en El Campin, calienta el racismo (Cápsulas)

One Comment

Victo Hernan Restrepo Tapias.

30 noviembre, 2024 at 5:29 pm

LA DERROTA DE NACIONAL
Nos ganaron de suerte y por un error, vi un Nacional maduro y serio, lástima dos parpadeos, es el problema de este sistema de torneo, una mala noche y se pierde el trabajo del año.

A Nacional le falta que sus delanteros tengan más cabeza fría, el equipo es vertical pero vertiginoso, trepidante, si fueron un poco más calmados, serenos y tranquilos al pisar el área rival no se sufriría tanto los partidos. De todas las oportunidades acertaran dos, sería todo más cómodo para todas las líneas del equipo.
Víctor Hernán Restrepo Tapias

Hincha de Nacional
Cali.

Responder