“No es una postura política, son derechos humanos básicos” (w.v.)

Por Alfredo Carreño
Actualizado: 28 agosto, 2020

Real Salt Lake y Los Ángeles FC no jugaron en protesta por la muerte de otro afro estadounidense (uno más) por un policía en Kenosha, Wisconsin.

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Por Williams Viera, desde USA

En medio de un clima político enrarecido en el que parece que la “democracia estadounidense se está muriendo en la oscuridad”, como lo sostiene en su cabezote el Washington Post, uno de los periódicos insignias de la nación de las Barras y las Estrellas, el fútbol sufrió los embates de la violencia que se han registrado como consecuencia de la muerte del afroestadounidense Jacob S. Blake luego de recibir cuatro de siete tiros en su espalda durante el arresto que hacía el policía Rusten Sheskey. El incidente ocurrió en Kenosha, Wisconsin.

El colombiano Óscar Pareja, técnico del Orlando City, también apoya el movimiento de paro.

Ese homicidio y las innumerables protestas, obligaron a postergar cinco partidos de la MLS como parte de una rebelión de los jugadores en contra de los problemas de racismo en Estados Unidos. Esto, sin embargo, no dejó nada contento a Dell Loy Hansen, dueño del Real Salt Lake, equipo que iba a enfrentar a Los Ángeles FC.

“Ellos apoyan temas nacionales, pero está claro que no apoyan a nuestra ciudad o la organización. Está más que claro”, dijo el dueño del Real Salt Lake.

En un comunicado el Comisionado de la MLS, Don Garber, criticó la actitud de Hansen y reiteró su apoyo a todas las víctimas. “Aprecio los esfuerzos de Dell Loy Hansen para construir el deporte del futbol en Utah. Su compromiso hacia la MLS, la NWSL y la USL, como también al deporte a nivel juvenil han sido significativos.

Sin embargo, estoy totalmente en desacuerdo con los comentarios que hizo y la manera que fueron expresados. No reflejan las opiniones de la MLS. Este es un momento para que todos nosotros trabajemos unidos en la búsqueda por la igualdad racial y la justicia social. Major League Soccer y todos sus clubes continuarán apoyando y creando iniciativas que promulguen el cambio verdadero”.

Lo más reciente de las declaraciones de Hansen es que la MLS le iniciará una investigación. ¿Por racismo? Es la pregunta que se hacen en medios deportivos.

Joseph-Claude Gyau del FC Cincinnati fue contundente: “Esta no es una postura política, son derechos humanos básicos”.

Joseph-Claude Gyau del FC Cincinnati se enteró de los eventos históricos que se desarrollan en los deportes estadounidenses, como lo hicieron muchos, a través de una notificación en su teléfono de que los Milwaukee Bucks de la NBA no jugarían su juego de playoffs programado contra Orlando Magic.

A partir de ahí, las cosas comenzaron a caer en cascada, ya que más jugadores de la NBA, WNBA y MLB eligen no jugar sus juegos en protesta por el tiroteo policial a Jacob Blake.

Entonces, Joseph-Claude Gyau comentó: “Esta no es una postura política, son derechos humanos básicos”.

Los goles en la primera mitad de Romell Quioto y Lassi Lappalainen le dieron al Montreal Impact una victoria, 2-0, ante los visitantes de Vancouver Whitecaps el pasado martes, 25 de agosto en la noche, con la presencia de 250 espectadores en el Saputo Stadium.

Romell Quioto anotó para Montreal Impact.

Orlando City y Nashville SC fue el otro partido que se jugó por la MLS. La victoria fue para el local, 3-1, pero el técnico de los púrpuras, el colombiano Óscar Pareja, aseguró que ellos no hubieran jugado el encuentro si hubiesen recibido toda la información a tiempo. Hay que recordar que este partido fue el primero del día, por lo que no alcanzaron a saber la determinación de las demás franquicias de la liga.

Pero mientras el deporte en Estados Unidos prefiere protestar por el tiroteo a Blake, Jared Kushner (yerno del presidente Donald Trump), dice que “los jugadores de la NBA tienen un ‘lujo’ financiero para tomarse una noche libre”.

En tanto, Trump, desobedeció las normas y habló desde la Casa Blanca para aceptar la nominación republicana que le permitirá buscar la reelección a un nuevo periodo de cuatro años, pero dejó en claro que lo que sucede en las calles y en el deporte de Estados Unidos le es políticamente útil.