Capsulas de Carreño

¡Por fin ganó el DIM, por fin clasificó…!!! 

Un DIM que materializó su dominio en autoridad en el terreno  de juego, en dominio del esférico, en recuperación  de espacios, en dos goles (de Leider Berrío y Francisco Chaverra) y en triunfo vital para el equipo y para la hinchada. Foto @alejandrocallef. 

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Por María Victoria Zapata B.
Columnista Cápsulas.
María Victoria Zapata, Dama Roja del comentario o simplemente Pola.

Con el retorno de Brayan León y Francisco a Chaverra a la nómina titular después de pagar dos fechas de sanción por la expulsión de ambos en el clásico, y la obligación de sumar los 3 puntos para asegurar su cupo en cuadrangulares, el DIM anoche tuvo que enfrentar las inclemencias del clima, su ansiedad y falta de definición no obstante el dominio y manejo del balón,  así como del replegado módulo táctico matecaña que conspiró también en contra su necesidad de abrir el marcador.

Después de un primer tiempo pasado por agua y además muy tensionante, debido a la escasez de ataque y opciones rojas en el arco  visitante (una sola, de Homer Martínez al minuto 5),  y la imposibilidad de atravesar el cerco defensivo rival, en contraste con la fogosidad ofensiva del Deportivo Pereira,   el período complementario escribió otra historia para el DIM.

El  dinámico y aguerrido fútbol rojo que hizo su aparición después del intermedio, la anotación de Leider Berrío, al minuto 50, que empezó a despejar el camino del anhelado a paso a  seminifinal y el golazo de Francisco Chaverra, al 70, refrendaron una  clasificación que había quedado en suspenso tras los empates ante Fortaleza y Nacional y las derrotas con Bucaramanga y Tolima.

Y también aligeraron un poco la pesada carga anímica que arrastra el equipo debido a la esterilidad de sus delanteros cuyos números son  más que precarios, a la  falta de gol y al festival del desperdicio en que se ha constituido la ofensiva del DIM durante la presente temporada y que desentona por completo con el fútbol que exhibe el cuadro rojo.

Anoche, después de un primer tiempo opaco y desesperanzador, nos encontramos con un DIM  punzante en su ataque, ambicioso y decidido. Un DIM que materializó su dominio en autoridad en el terreno  de juego, en dominio del esférico, en recuperación  de espacios, en dos goles (de Leider Berrío y Francisco Chaverra) y en triunfo vital para el equipo y para la hinchada.

Esta  victoria tan sufrida, anhelada y obligatoria por sus  antecedentes, lo mismo que por sus implicaciones, no borra la preocupación que es permanente, respecto de las tantas y tantas opciones de gol que el Equipo del Pueblo desperdicia partido a partido. Y ni que decir del casi nulo aporte en goles de los atacantes  rojos en la presente temporada.

Por ello no sorprende que Chaverra, el polifacético volante  del DIM sea, con 5 anotaciones, el goleador del equipo, seguido por Leyser Chaverra con 3 (de pena máxima), lo mismo que el chino Sandoval. Leider Berrío marcó  ayer  su segundo gol.  Brayan León registra un solo gol;  Mender García, cuya titularidad no deja de ser incomprensible, no ha marcado goles. Tampoco el delantero argentino Francisco Fydriszewski.

Finalmente, el valor anímico y motivacional de la victoria al  Deportivo Pereira es enorme,  por cuanto le da otro impulso al DIM en la antesala de la fase definitiva del campeonato. Igualmente puede disminuir tanta  presión  por la  falta de definición,  generar más confianza entre los mismos jugadores y, ojalá, mayor serenidad en el ataque rojo.

Concluyo mi columna, con frase que expresé anoche, al término del compromiso: ¡Qué clasificación tan sufrida, aplazada, esperada, y también desesperada…!!! ¿Cuándo dejará de tener razón el legendario Malevo con su histórica y siempre vigente sentencia roja, «Oh, poderoso DIM, nos vas a homicidar»?
[María Victoria Zapata B.] 

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