Capsulas de Carreño

Preocupa la defensa roja. Por Pablo Calle Jiménez.

Por Pablo Calle Jiménez

 

 

*Ya tenemos la clasificación por Liga y la obligación es obtener el cupo en Copa Libertadores.
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En mi concepto el empate ante Equidad preocupa más de lo que duele, pues ya estamos clasificados y lo que se sume de aquí en adelante vendrá por añadidura: servirá para Reclasificación y para entrar en el bombo alto. Preocupa el empate, digo, porque Zubeldía formó con el 11 titular y no pudimos pasar del empate ante un equipo chico, que ocupa el puesto 12 en la tabla y está al borde de la eliminación. Y porque ese equipo, para acabar de ajustar, vino sin sus principales referentes y aún así nos complicó al punto en que en varias ocasiones nos salvamos de la derrota.
No me parece que Medellín haya jugado tan mal pero sí me preocupa la total ausencia de solidez defensiva. Van 15 fechas de Liga, 4 de Libertadores y 2 de Superliga; 21 partidos en total para solidificar una zona clave si se aspira a cosas importantes. Y aún así hasta el rival más débil nos pone a pasar necesidades atrás. A Zubeldía le urge tomar correctivos pues pese al nivel de jugadores como Mosquera, gran líder defensivo, se siguen viendo fisuras que no debe permitirse un club con las aspiraciones del Deportivo Independiente Medellín.
También me dejó pensativo que le negaran tanto la pelota a Marrugo. Bien es cierto que su incidencia en el juego tiende a mermar ahora que Quintero está ocupando la función de creativo. Eso está muy bien, pero Medellín no puede darse el lujo de subutilizar a un jugador con las condiciones del cartagenero que es ídolo, capitán y campeón con el equipo. Un jugador que nos da salida limpia, cambio de frente, gol, pase gol y que partido a partido no le niega una gota de sudor a la casaca poderosa. La pelota al 17 que muy seguramente se nos despeja el panorama.
El festival del despilfarro no me preocupa tanto, todos los delanteros se pierden goles. El domingo le tocó a Viola, que tuvo hasta 6 oportunidades de marcar y no pudo. Normal, ya se le abrirá el arco, lo mismo que a Castro. Lo que sí molesta es que cuando le pasa a Caicedo los insultos son de grueso calibre. Menos mal Viola es blanco y argentino, esto le da margen de maniobra.
Sea pues esta la oportunidad para tomar correctivos. Si de algo sirve tropezar ante rivales débiles, es que el grupo pone los pies sobre la tierra y toma conciencia de los aspectos a mejorar. Claro está que el objetivo este semestre es clasificar a segunda ronda de Libertadores, y para ello tendremos que vencer a Emelec y River Plate. Es menester que el equipo mejore en todas sus líneas.
El calendario no da respiro y esta semana Medellín tendrá dos partidos más: el miércoles ante Jaguares en Montería y el fin de semana ante América en el Atanasio. Lo ideal sería que viajara entre semana un grupo alterno, para que los titulares puedan recuperarse del partido del domingo y se eviten un viaje que sería igualmente desgastante. Este grupo titular puede disputar el partido ante América y quedar en óptimas condiciones para el decisivo duelo ante Emelec, programado para el miércoles de la próxima semana.
Así que a jugar bien y ganar. Ya tenemos la clasificación por Liga y la obligación es obtener el cupo también en Copa Libertadores. Estamos a dos partidos de lograrlo. Sin excusas, sin atenuantes, somos Medellín.

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