Capsulas de Carreño

¿Qué pasa en Atlético Nacional?.. Por Guillermo Carmona Molano

 


Por Guillermo Carmona Molano

*¿ O el proyecto deportivo siempre va para la mansarda, a expensas de lo que piense el cuerpo técnico de turno?.

En Nacional se volvieron a equivocar contratando a Juan Carlos Osorio, muy preparado y competente pero bastante controvertido, inmaduro, con precaria inteligencia emocional.

Quiere ser el protagonista de novelas.
Manipula, sabe relacionarse con periodistas, barras bravas y directivos y si estos no le hacen caso, se cree imprescindible, conoce muy buen del portafolio de mecanismos de presión y tempranamente, amenaza con irse para Londres, ¿acaso para ponerle la queja a Antonio José Ardila?

Presiona sin tregua y les hace creer a sirios y troyanos que es pretendido por todos y que es candidato a dirigir la selección del mundo. Genio y figura.

Ya aparece abrazado en fotos con el líder de la barra “Los del sur”, los que le hacen presión alta… a la dirigencia verde y les imponen condiciones.

Osorio se cree uno de los pioneros de la táctica, de la estrategia y del juego por las bandas. Tiene la autoestima bien alta.

Subestima y mira a los canteranos de reojo y como si no lo supiéramos todos, de entrada les advirtió que la iban a tener muy difícil y disimula su desdén por las divisiones menores poniendo a debutar a Cabal y Estupiñán en el amistoso con Lanús. Dicen que van a tener oportunidades Moya, Reyes y Blanco Los incautos le creen.

Borró a la revelación del primer torneo, Nicolás Hernández, arrancó sin darle preponderancia a Sebastián Gómez y Rovira, ya autorizó el préstamo de Mier y Hernández a Santa Fe, Sarmiento a Cúcuta y Palacio al Tolima.

Directivos verdes y cuerpo técnico salieron a decir que querían que Nicolás Hernández no se fuera, como si no conociéramos y escucháramos a Osorio cuando desde las primeras declaraciones dijo, que necesitaba un central zurdo, fue la primera de las contrataciones que mencionó, como si no intuyéramos que quiere además reducirle competencia en el puesto a su amigo Henriquez con quien ayudó a crear un ambiente pesado en la parte final de la era del anterior cuerpo técnico.

No está bien que la Doctora Carolina Ardila, hija del Doctor Antonio José Ardila, sea representante de jugadores del Verde, entre ellos de Nicolás Hernández y de Tomás Mier. Hay que serlo y parecerlo. Eso lo aconsejan las reglas del gobierno corporativo. Mucho preocupa cómo funcionan las líneas de mando y la cultura organizacional en Atlético Nacional.

Es lo mismo que se critica cuando a los principales medios de comunicación llegan las incestuosas relaciones con las política, patrocinan y promueven candidatos y hasta participan directamente en contiendas electorales, lacerando su independencia y el sagrado deber de informar y orientar bien a la opinión pública, desde la verdad.

Necesitamos de periodistas deportivos preparados, independientes, claros, precisos, que investigan y se documentan, que dicen lo que otros callan, como Carlos Antonio Vélez, Weimar Muñoz Ceballos.

No obstante la actual coyuntura financiera del verde, al profesor Osorio eso le importó un tamarindo y arrancó exigiendo la contratación de 8 jugadores, lo que limitará la oportunidad para juveniles.

En términos reales el problema no es el profesor Osorio, sino de quienes le permiten sus desafueros.

Nacional tiene unos estatutos sociales, una junta directiva, un plan estratégico de largo plazo, un proyecto deportivo, con políticas, principios y valores, una comisión técnica y supone uno que quien llegue a la institución, como directivo, empleado, jugador o técnico, debe acatarlos y no imponer sus reglas de juego, salvo que no haya nada de esto y que los cuerpos técnicos lleguen con su propio verso y hacen lo que les viene en gana y someten a todo el mundo. Muy grave si las cosas fueran así.

¿La cúpula verde y de la Organización Ardila están realmente bien informados?

¿Desconocen qué Nacional es una institución de gran impacto social?

¿Lo deportivo somete lo corporativo?

¿O será que piensan que el negocio es más publicitario que deportivo y financiero?

¿O se acostumbraron a perder tiempo y despilfarrar plata, a descuidar el patrimonio deportivo y a contratar a quienes vienen, sin el ADN verde, ganan duro?

¿ O el proyecto deportivo siempre va para la mansarda, a expensas de lo que piense el cuerpo técnico de turno?.

Compartir:

3 Comments

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *