Vladimir Hernández y el gol de chilena… La jugada la ensaya en los entrenamientos…

La portada y contraportada del álbum fotográfico de Vladimir Hernández Rivero con Junior son dos retratos en los que aparece haciendo chilenas (ante el Chicó y Quindío). Ayer el futbolista araucano volvió a pasar las páginas de su archivo y mientras lo hacía recordó aquellas chilenas fallidas. “Aquí lancé un centro”, dice mientras señala la imagen del juego ante el Quindío. “Esta por poco termina en gol”, indica  mostrando la acrobacia ante el Chicó.

El lamento quedó atrás y ahora busca la imagen de esa chilena que significó el gol ante el Deportivo Cali, el domingo anterior, que tiene a todo el mundo hablando de él. En compañía de su esposa y padres, el talentoso volante le abrió las puertas de su casa a  EL HERALDO y contó detalles de su vida personal.

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¿Cuántas veces ha visto ese gol de chilena?
(Risas) Muchas veces, ya mi esposa está molesta. Siempre que hago un gol lo miro muchas veces. Ahora, imagínate este de chilena. Lo miré hasta las tres de la mañana, repitiendo casi lo mismo, me levanté y otra vez lo volví a mirar. Creo que toda esta semana me va a tocar verlo.

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¿Qué es lo que más le sorprende de ese gol de chilena?
Me sorprende mucho porque es un gol que soñaba. Como dos veces alcancé a tirar una chilena, pero no conecté bien el balón, recuerdo que lo hice en un partido con Chicó y Medellín. Cuando lo vi enseguida dije: “Qué golazo el que hice”. Me satisface hacer un gol como estos que a veces se ven en PlayStation.

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Ya no le tiene que envidiarle un gol de esos a James Rodríguez…
(Risas) Vi el gol de James y me tocó a mí hacerlo en Colombia. Lo anoté desde una distancia más lejana, en donde cogerla de primera no es fácil.

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¿En qué momento se da cuenta que pueda hacer esa acrobacia?
Cuando veo que el balón viene a mitad de camino y en globo dije: ‘Aquí es’. Esta jugada yo la hago en los entrenamientos.

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¿Qué le dijeron sus compañeros en el camerino?
De todo. Estaban muy contentos. Uno de los que me estaba esperando era Oidel Pérez, que me cargó.

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¿Quién es el que más le ha ‘mamado gallo’ por el gol?
Yhonny Ramírez, que es uno de los más cansones, me decían que si solo iba a meter goles de penalti. Y cuando vio estos dos golazos me dijo que había saltado y se alegró mucho. Tesillo me preguntó una dirección y no se la di, entonces me dijo que ya estaba agrandado porque metí ese gol de chilena.

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¿Usted cree que este es el mejor gol que se ha marcado en el estadio Metropolitano?
La verdad hay muchos, pero hace mucho tiempo no se marcaba un bonito gol como este. Giovanni Hernández y Carlos Bacca también hicieron goles de media chilena. Omar Pérez hizo uno de la mitad de la cancha ante el Quindío, ese día estaba yo en la tribuna y ni por ahí pensaba yo que iba a llegar al profesionalismo.

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¿En qué momento se dio cuenta que iba a ser un futbolista profesional?
Cuando comencé era el jugador de la norma, no era fácil porque solo jugabas 20 minutos. Pero cuando llegó Umaña se me dio la oportunidad de jugar porque Arango no pudo y entonces dije que esa era mi oportunidad y me tenía que quedar y así fue. Umaña no me sacó, tuve muchos partidos seguidamente y desde ahí empezó todo.

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¿Si no hubiese sido futbolista que estuviese haciendo?
Quizás no estuviese aquí, a lo mejor en Arauca, que fue donde nací, me vine a los 9 años para Barranquilla y no sé qué estaría estudiando. Acá tuve la oportunidad de graduarme e ir a una universidad, pero no terminé por cosas del fútbol.

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¿Viaja a Arauca?
Yo fui hace como tres años, los visité. Me esperaron con un carro de bomberos, el Alcalde estaba pendiente.

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 ¿En Europa de que equipo es hincha?
Barcelona.

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¿Cuántos goles de chilena había hecho en el PlayStation?
Varios, en Play es más fácil hacer los goles de chilena, acá es más complicado.

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¿Qué tanto se parece el Vladimir del PlayStation a usted?
No, el Vladimir del Play está como muy alto, es muy diferente, pero es muy bacano estar en un videojuego.

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¿Cuál es su mejor amigo en Junior?
Tengo muchos. Soy muy amigable y querido en el equipo, pero con Chunga he tenido una bonita amistad y ahora con Celis, andamos juntos los tres.

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¿De quién le gustaría ser socio en el fútbol?
En Colombia de Omar Pérez, Mayer Candelo, que son jugadores que piensan diferente, gracias a Dios tuve la oportunidad de estar con Macnelly, con el que se juega muy fácil. En el mundo me gustaría jugar al lado de Messi, que es mi ídolo.