Capsulas de Carreño

DIM 1- Santa Fe 2:  Una historia triste que se repite.

Pelotazo de Brayan León en el rostro del volante argentino Marcelo Meli y su consecuente expulsión pulverizaron el trabajo del DIM  y le dieron un giro de 180° al partido. Foto tomada de minuto30.com.

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Por María Victoria Zapata B.
Columnista Cápsulas.
María Victoria Zapata, Dama Roja del comentario o simplemente Pola.

Un fútbol rojo que no se vio reflejado en el marcador, una acción irresponsable de Brayan León y un arbitraje con muchos y muy severos cuestionamientos,  dejaron como resultado la derrota del Deportivo Independiente Medellín, 1-2 ante Independiente Santa Fe,  en el partido de ida de cuartos de final de Copa Colombia, que se jugó anoche en el estadio Atanasio Girardot.

Hasta el minuto 31, cuando  fue castigado con roja directa  el delantero del DIM, el cuadro local  mostraba un  juego netamente ofensivo,  erigía como figura al guardameta cardenal  Weimar Asprilla y era claro dominador del encuentro. Infortunadamente,  el pelotazo de León en el rostro del volante argentino Marcelo  Meli y su consecuente expulsión pulverizaron el trabajo del DIM  y le dieron un giro de 180° al partido.

Las anotaciones santafereñas de  Christian Mafla, al minuto 33, y  de Hugo Rodallega, al 52, nublaron aun más  el panorama del DIM  en este crucial partido de Copa Colombia. No obstante el gol del polaco Fydriszewski,  al minuto 58,  los  protuberantes yerros del árbitro Álvaro Meléndez, especialmente la omisión de una mano el área, de Meli, en  penal clarísimo  para el DIM  al minuto 71, tuvieron  también incidencia directa en el resultado del partido.

 

¿Hasta cuándo, Brayan?

No deja de preocupar la reincidencia en las sanciones y expulsiones por parte del delantero Brayan León y las afectaciones  de estas últimas en el comportamiento y rendimiento del DIM en el terreno de juego.El  5 de febrero de 2024, en el juego DIM 1- Deportivo Cali 0, fue expulsado por doble amarilla; pocos días después, el 24 de febrero en el partido  Alianza 2-DIM 0, recibió roja directa en el minuto 40.

En el presente año fue expulsado en el partido DIM 1- Nacional1, que se jugó el 4 de mayo.  También  en el juego DIM 3- Envigado 4,  el 4 de julio, por doble amarilla.

 

Tampoco se olvida la reacción de León Muñiz, en el  clásico  de semifinal de Copa Colombia  que se llevó a cabo el 18 de noviembre de 2024, en el que el jugador  Álvaro Angulo fue expulsado por un  simulado golpe en el rostro al atacante rojo, medida que fue reversada minutos después por el árbitro José Ortiz, tras llamado del Var, en cuyo video se constató el engaño del jugador del DIM.

 

En el caso de Brayan León, los goles se refrendan con juego limpio, con madurez y con respeto por el adversario y por la camiseta, algo que no ocurre con  el delantero del DIM. Ojalá el  técnico Alejandro Restrepo tome medidas… En la memoria quedan las imágenes de su risa y puño  levantado  y cerrado cuando le sacaron la  tarjeta roja al jugador Angulo,  en el clásico de Copa, ni el fuerte balonazo al centrocampista Meli en el partido jugado  la noche anterior. Esos hechos no tienen razón de ser y en modo alguno  deben repetirse.

 

¿Y hasta cuándo estos arbitrajes?

El de Álvaro Meléndez, anoche, no fue un caso aislado. Por ratos se  dejó manejar el partido por el equipo visitante, omitió un penal  favorable al DIM  en un momento trascendental del partido y le sacó una  segunda  amarilla a Yairo Moreno que desembocó en su expulsión, al minuto 85. Su único acierto fue la  muy merecida roja a Brayan León Muñiz.

El árbitro y el arbitraje volvieron  a constituirse en los protagonistas de un partido, un hecho recurrente en el fútbol colombiano  pero irrelevante para una Comisión arbitral y una Dimayor que no  adelantan gestiones tendientes a la mejoría en la preparación  de los jueces centrales  ni brindan  ningún tipo de garantías  a los equipos ni al espectáculo como tal.

 

Y en cuanto al DIM…

Jugó un excelente partido hasta la irresponsable expulsión de Brayan León. Fue, igualmente, un equipo dinámico  y veloz que  no perdió de vista el arco contrario, que  buscó el triunfo cuando aun estaba completo  y que  luchó incansable por el empate cuando el marcador estaba 0-2.

Sin embargo persisten  las preocupaciones por la insolvencia de la zaga, la carencia de filtro en mitad de campo, la falta de definición  y la inexistencia de jugadores de recambio.

No hay reemplazo para Jarlan Barrera,  un socio o ubicación correcta para el polaco Fydriszewski, ni una defensa confiable y segura en el DIM.

En síntesis, hay partidos que duele perder y  otros que nos devuelven en el tiempo a ingratas recordaciones.  Este de ayer, ante Santa Fe, tuvo un poco de ambos…
[María Victoria Zapata B.]

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