La selección Colombia sigue defraudando.

By Alfredo Carreño
Updated: 6 junio, 2025

BARRANQUILLA. «Cucho» Hernández en el mano a mano con Advíncula. Colombia no tuvo precisión en los últimos metros contra Perú. Foto: AFP, tomada de depor.com.

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Por Ángel Julio Rodelo.
Comentarista RCN – Barranquilla.

Finalizado el partido Colombia Vs. Perú estalló una bomba: En redes sociales alguien soltó la especie de que Jhon Jáder Durán había armado tropel en el camerino porque no quedó contento con su sustitución, y esta versión se propagó de forma rápida; la especie fue desmentida por el mismo Durán y James Rodríguez en declaraciones post partido. Y, a menos que aparezcan pruebas irrefutables que demuestren que el evento realmente ocurrió, todo quedará en una burda especulación.

Claro está, lo anterior no podrá, de ninguna manera, eclipsar la pésima presentación de la escuadra colombiana. El juego fue desteñido y lento, sin ideas y con carencias dentro del concepto ofensivo.

Los Incas batallaron de forma inclaudicable en el Metropolitano, prevaleciendo la estructura colectiva por encima de todo. El entrenador Óscar Ibáñez implantó un bloque corto en zona media baja, con soportes permanentes y cercanos. Esa estrechez defensiva terminó controlando los intentos apresurados y confusos de la Tricolor.

Durán fue incapaz de generar verdadero peligro y fue controlado por los centrales Zambrano y Garcés. Los defensores lo bloquearon al máximo y, finalmente, fue sustituido por su intrascendencia en ataque.

Aunque no está demás señalar que el bajón fue general. Arias y James, al igual que el Cucho Hernández, poco aportaron. Si bien el seleccionado peruano esperó y casi nunca presionó en zona alta, los encargados de producir el juego en el sector medular, no elaboraron el desequilibrio que se esperaba, ni por las bandas ni en los terrenos interiores. Los laterales, Borja y Muñoz, tampoco ampliaron de forma efectiva los carriles, y cuando cruzaron alguna que otra pelota, la misma no tenía un destinatario específico y normalmente era evacuada por los zagueros peruanos.

La oscuridad del juego colombiano se mantuvo incluso después de los ingresos de Suárez, Hinestroza, Campaz y Ríos. Quizás hubo una mejor energía, pero el atropellamiento en el desarrollo de las acciones se mantuvo. Y lo más triste es que, salvo un cabezazo de Suárez que pegó en el palo, no se reseña un remate directo hacia la portería de Gallese. Y esa data si es lamentable, porque reflejó la palidez del onceno local.

Perú, con muy poco, se llevó un punto del Metropolitano, pero incluso acarició el triunfo con Flores, afortunadamente para los intereses de Lorenzo y Colombia, Mier estuvo atento y blindó su cabaña. De lo contrario estaríamos hablando de una catástrofe futbolística en la Casa de la Selección, que, como es costumbre, volvió a responder llenando las graderías del escenario futbolero.