Capsulas de Carreño

“Soy Antioqueño, Toda La Vida”: Guillermo “Chiqui” Londoño

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Guillermo León Londoño Zapata es el Scouting del Manchester City en Colombia. El “Chiqui” es quien observa talentos en Suramérica. Es un cazatalentos que dedica su tiempo exclusivamente a mirar jugadores que por su riqueza técnica tienen futuro para actuar en el balompié internacional.

Es un técnico típico del fútbol paisa, descubridor de jugadores y fundamentador, tiene curso ATFA con pasantías en Boca Juniors, River Plate e Independiente de Avellaneda; es herencia de la Liga Antioqueña de Fútbol. Su nombre seguirá registrado en los libros de la historia como uno de los tantos técnicos que nos han regalado vueltas olímpicas con buenos futbolistas y sobre todo con seres humanos intachables.

El “profe” Londoño nació y vivió en los alrededores del parque Gaitán en su natal Manrique Oriental. Proviene de una familia trabajadora,  humilde y llena de valores que encabezaban sus padres Jaime Arturo y Aura Rosa.

Desde niño fue travieso con el balón, su calidad técnica hizo que se enamorara cada vez más de este deporte, su infancia fue haciéndole gambetas a los problemas sociales, niñez que disfrutó desde los 11 años porque en 1969 ya jugaba partidos oficiales en los Interescolares representando a la Escuela Baldomero Sanín Cano. Este evento era dirigido por Humberto “El Turrón” Álvarez.

 

Gran jugador
Su conexión con LAF fue prematura porque desde 1971 fue federado actuando en la quinta categoría con el equipo La Milanesa. Hizo todo el proceso hasta llegar a las categorías superiores, con Taller Latino en Ascenso y Primera B y en la Primera A con Fabricato (campeón), Nacional (campeón) y Medellín. Quienes lo vieron jugar afirman que era un futbolista muy bien dotado técnicamente, que era un fenómeno con el balón, además jugaba por diversión, con lujos, elegancia y goles.

En 1975 y como premio a lo hecho en el fútbol aficionado fue llamado para integrar la Selección Antioquia Juvenil que era dirigida por el profesor Luis Alfonso Pizarro, selección con una nómina de lujo para la época, con Fabio “La Gallina” Calle, Alberto Cañas, Gustavo Botero, Johnny Aguilar, Pedro Sarmiento, Jorge “Pelao” Peláez, William Knight, Alonso Marín, Hernán Darío Herrera, John Jairo Carmona e Iván Darío Castañeda entre otros. Jugaron la final en Santa Marta y terminaron subcampeones en un torneo con sospechas por parte de los participantes. El campeón fue Magdalena.

Su gran campaña con la selección antioqueña y su fútbol alegre hicieron que los profesores Humberto “Tucho” Ortiz y el yugoslavo Blagoje Vidinic lo llamaran para hacer parte de la delegación colombiana para participar en el Suramericano Juvenil de Venezuela en 1977. Su actuación en el estadio Guillermo Soto Rosa en la sede de Mérida ante la Selección de Brasil fue memorable, allí fue la figura de Colombia. Fabio Calle, Pedro Sarmiento, “Nano” Prince, J.J. Taborda, Norberto Peluffo, “Didí” Valderrama y el “Chocó” González hacían parte de esa selección.

Cuando regresaron del suramericano Atlético Nacional ofreció $100.000 por los derechos deportivos del “Chiqui”, cifra escandalosa para la época, pero fue Plastiquímica de don David Meza  quien se quedó con las gambetas y la picardía del buen delantero antioqueño. Allí jugó en los torneos de la Liga el resto de la temporada al lado de Néstor Congote, “Tato” Uribe y “Terra” Vélez. Para 1978 es llamado para integrar la nómina del Torneo Nacional de Reservas con el conjunto verde de Antioquia. Era el inicio del famoso “Kínder” de Osvaldo Zubeldía, año donde el “Chiqui” logró el botín de oro con 14 goles en la Primera A de la Liga. Fue compañero de equipo de Carlos Ricaurte, Gabriel Jaime “Barrabás” Gómez, Jorge Porras, Víctor Luna, Norberto Peluffo, Pedro Sarmiento y Hernán Darío Herrera.

En 1979 pasó al Deportivo Independiente Medellín para hacer otra temporada en el Torneo Nacional de Reservas, época en que los aficionados llenaban las gradas del Atanasio Girardot para ver el preliminar y muchas veces se iban sin ver el juego de fondo que era el choque profesional. Ese equipo lo dirigía Bernardo “Cunda” Valencia (QEPD) y estaba conformado por jugadores como “Ormeño” Gómez, Jaime García, Rogelio Zapata, Héctor Vasco, Albeiro Casas, Luis Fernando “Fierrito” Montoya, Nilsen Zapata, Marcos Velásquez y “Jimmy” Arango. No alcanzó a jugar fútbol profesional porque era difícil; la Dimayor permitía 5 extranjeros en la cancha y ese año el DIM tenía en nómina a Palaveccino, Irigoyen, Ernesto Díaz, Fernando Donaires, Manuel Benjamín Pereira, Ponciano Castro y Óscar “El Papi” Mejía. Así era muy duro llegar al primer equipo.

 

Profesional y Técnico
Posteriormente como futbolista fue campeón invicto con Fabricato en 1980, luego participó con Mejar Ltda., Inversiones El Águila,  Betacar y Carnes Casablanca hasta 1987,  a la par trabajaba como cobrador en moto de una empresa. Tuvo dos viajes en diferentes años a los Estados Unidos sin gran éxito. En ese mismo año 87 creó una empresa de uniformes deportivos pero solo duro una temporada porque comenzó a mirar los procesos de la Selección Antioquia. Su gran oportunidad fue con el profesor Luis Fernando Montoya en 1991, ayudante de campo con una Prejuvenil, a partir de allí comenzó a capacitarse e inició sus estudios de Tecnólogo Deportivo en el Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid; su carrera como técnico se fue afianzando cuando el profesor Jairo Ríos lo llamó en 1995 para integrar el cuerpo técnico del desaparecido Deportivo Antioquia.

En 1997 pasó al Medellín con el mismo Jairo Ríos. Allí comenzó una etapa maravillosa para afianzar divisiones menores, pues dirigía la Primera A y la Primera B en la Liga, en esos equipos ya se asomaban “Choronta” Restrepo, “Conejo” Jaramillo, Ricardo Calle y el “Chavo” John Jairo García. Soplaban buenos vientos, ese mismo año Arturo Bustamante le entregó la Selección Antioquia Prejuvenil a solo 20 días antes de iniciar el Torneo Nacional; fueron a Cartagena ocupando un honroso tercer lugar. La continuidad entregó sus frutos porque para el año siguiente con más tiempo de trabajo esa misma categoría se coronaba campeona invicta en Bogotá ganándole la final al Valle del Cauca.

David González, Héctor Córdoba, Sebastián Echavarría, Santiago Pérez, Diego Toro, Nicolás Torres, Héctor Alejandro Vasco y Hamilton Martínez hicieron parte de la Selección que le dio al “Chiqui” su primer título con una selección departamental. Después de esa vuelta olímpica el profesor Londoño se fue al Once Caldas de Manizales, allí estuvo desde 1999 hasta el 2003, realizó su trabajo de cazatalentos, entre otros trabajó en etapa de formación a Alexis Henríquez, Mauricio Casierra, Javier Araujo, Dayro Moreno, Diego Arango, Luis Núñez y Elkin Soto.

En el 2003 retornó a Medellín  para dirigir una Selección Prejuvenil que también fue campeona. En la nómina aparecían David Ospina, Santiago Tréllez y Daniel Gómez. Para 2004 con la Selección Antioquia Sub 21 con juveniles logró dar la vuelta olímpica en Yopal, Casanare. Tenía ya a Carlos “Fututo” Paniagua como asistente. Los jugadores de esta Selección tocaron en su mayoría fútbol profesional como Byron García, Marlon Piedrahita, Camilo Zúñiga, Juan David Valencia, Anderson Zapata, Marco Echavarría, Gustavo Bolívar, Edwin Calle, Víctor Giraldo y César Valoyes, entre otros; con la misma base de jugadores fue subcampeón de los Juegos Deportivos Nacionales.

El “Chiqui” Londoño pasó a las divisiones menores del DIM luego del subtítulo de la Prejuvenil  hasta el 2008 cuando hace la pausa y se da el nacimiento de Embajadores FC,  que fue su propio club con gran acontecimiento en la Liga y en el torneo nacional de la Primera C. Este proyecto fue manejado por su hijo Diego. Para 2009 es contratado por Atlético Nacional como Scouting, allí laboró hasta el año 2012, ya que para el 2013, por recomendación directa del profesor Carlos “Piscis” Restrepo lo vincularon en el mismo cargo en el Manchester City, trabajo que desempeña hasta la fecha.

A groso modo ese es el “Chiqui” Londoño, quien se paseó por tierras brasileñas viendo los trabajos de Luis Felipe Scolari en Palmeiras, Corintians y Sao Paulo, el mismo de las capacitaciones en Argentina con la Escuela Renato Cesarini en Rosario,  el del curso de fútbol de la FIFA y el mismo que fue certificado por el SENA en táctica, técnica y estrategia. Palmarés más que suficiente para denotar con mayúsculas que por la Liga Antioqueña de fútbol pasó un “grande”.
(Fuente: Comunicaciones Liga Antioqueña de Fútbol)

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